Puede haber un gran fuego en nuestros corazones, pero nadie viene nunca a calentarse en él, y los transeúntes apenas ven una brizna de humo.

El paraíso fue hecho para corazones tiernos, el infierno, para corazones sin amor.

Cuando tu hora de morir llegue, no seas como esos cuyos corazones están llenos de miedo a la muerte, para que cuando llegue su momento lloren y oren por un poco más de tiempo para vivir sus vidas otra vez de manera diferente. Canta tu canción de muerte y muere como un héroe que regresa a casa.

No nos conformemos con simplemente dar dinero. El dinero no es suficiente, se puede conseguir el dinero, pero la gente necesita que sus corazones amen. Por lo tanto, difunde tu amor donde quiera que vayas.

Si un libro viene del corazón, logrará alcanzar otros corazones. Todo el arte y el oficio del autor son de poca importancia para eso.

Deja que mi alma sonría a través de mi corazón y mi corazón sonría a través de mis ojos, para que poder esparcir sonrisas ricas en corazones tristes.

Vivan como hombres valientes, y si la fortuna es adversa, enfrenten los golpes con corazones valientes.

Antes de que pongamos nuestros corazones demasiado en algo, examinemos cuán felices son los que ya lo poseen.

Dios es el más cercano a aquellos con los corazones rotos.

No están muertos los que viven en los corazones que dejan atrás.

Realmente creo que la única forma en que podemos crear paz global es no solo educando nuestras mentes, sino también nuestros corazones y nuestras almas.

El mejor amor es el que despierta el alma y nos hace llegar a más, que pone fuego en nuestros corazones y trae paz a nuestras mentes. Y eso es lo que me has dado. Eso es lo que espero darte para siempre.