Mi consejo para otras personas con discapacidad sería que se concentrasen en cosas que su discapacidad no les impida hacer bien, y que no se lamenten por aquellas con las que interfiere. No sea discapacitado espiritual y fisicamente. No se permitan estar discapacitados de espíritu a la vez que físicamente.

La oscuridad, el bucle de pensamientos negativos en repetición, clama e interfiere con la música que escucho en mi cabeza.

No dejes que lo que no puedes hacer interfiera con lo que puedes hacer.

Nunca he dejado que mi educación interfiera con mi educación.